Venezuela, el 16 de Noviembre de 1861. Auténticos valores forjaron su personalidad ante la mirada formadora de sus padres, Foción Febres Cordero y Georgina Troconis. Georgina ingreso en el año 1890 al Convento de las Hermanas Clarisas, únicas religiosas que existían en la ciudad de Mérida, pero debido a problemas políticos se ejecutó la orden de que las jóvenes que habían ingresado al noviciado volvieran a sus hogares.
El día 8 de Septiembre de 1892, Georgina ingresó a la Congregación de Hermanas de Santa Ana, quienes dirigían el Hospital San juan de Dios en Mérida. En el año 1897, la comunidad de Hermanas de Santa Ana vivió momentos de terror y duda, debían suspender la fundación; es en este momento histórico cuando Dios dejó entrever su designio: tras la aprobación del Sr. Obispo, Mons. Antonio Ramón Silva, la Hermana Georgina Febres Cordero Troconis recibió el 5 de julio de 1900 la conducción del Hospital-hoy, Hogar San Juan de Dios- desde allí se reveló su servicio como Fundadora de las Hermanas de la Caridad de Santa Rosa de Lima.
Transcurrió el año de 1908, el “cúmplase Señor, tu voluntad en mí” resonó en los labios de la Madre Georgina. Fue para ella la hora de la enfermedad y la prueba de su fe. Murió el 28 de junio de 1925. Los restos de la Madre Georgina Febres Cordero, reposan en el Hogar San Juan de Dios, cuna de la congregación, en la ciudad de Mérida, Venezuela.